Mas de 40, y qué?

Recuerdo como hoy, hace ya unos años, cuando mi hermana menor Rosie, en una de nuestras acostumbradas salidas, baila con un apuesto hombre, y luego que regresa al bar me comenta asombrada: Viste? Es un viejo. Tiene 30 años!

Para ese entonces, Rosie debía contar unos 18 años, pero ahora, que hace un rato pasa los treinta, me la imagino comentando, ese es un jovencito de 30 años. Así nos cambian los puntos de vista.

Al pasar de los 40, una se siente dueña del universo. Hay quienes desean afirmar la grandeza de los 20, y yo digo: claro! Esto hasta que conozcan los 40, que son dos veces mejor. Se lo puedo asegurar.

Cada etapa tiene realmente su encanto, tengo la dicha de haber disfrutado cada década de las que cuento hasta ahora (cuando llegue a las 50 les informo si la cosa va mejorando). Si bien es cierto, que con la llegada de los segundos "ta" aparecen una serie de cambios en nuestro cuerpo, también es cierto que aparece un encanto por la vida.

Nunca antes me sentí mejor emocionalmente, hasta después de saber que, probablemente, me queda menos por vivir de lo que ya he vivido. Si, es cierto que físicamente y fisiológicamente los años se han dejado sentir en mi cuerpo,  que miro la vida de otra manera. Pero me siento más dueña de lo que hago. He aprendido a disfrutar la soledad y valorar la compañía.

Aun me quedan muchas cosas en mi "bucket list", y algunas necesariamente han tenido que retirarse, sin haberlas cumplido. Pero no tengo prisa por lo que falta, estoy viviendo cada momento intensamente y atesorando cada recuerdo.  Creando un patrimonio de momentos felices que me conviertan en millonaria.

También he aprendido que algunas cosas nunca cambian en tu forma de ser, y que la edad no da dignidad a las personas. La dignidad te acompaña desde siempre y hasta siempre, sobre todo si eres una persona con valores formados en la juventud.

Tengo más de 40 y todavía me sonrojo, algunas cosas me asombran, otras me sacan lagrimas de felicidad. Me gusta bailar sola, gritar en los conciertos, hacer dúos con mis amigas,  crear cuentos, ver películas rosa, caminar bajo la lluvia, hacer nuevos amigos. Tengo más de 40 y me siento tan afortunada y llena de vida, que siempre le digo a Juanita: "no me cambio ni por dos de 20".