Recientemente, como la mayoría pudo apreciar a través de la redes, celebré un año más de vida. Algo que realmente disfruto desde de todas las perspectivas que cada uno pueda imaginar.
Cada año tiene su encanto, y su forma especial de celebrar.
En este por ejemplo, dejé que la Hermana Mayor, me realizara una agradable
media sorpresa, digo media porque sabía que íbamos a desayunar, pero no la
forma en que ella había coordinado el desayuno, junto a toda mi familia cercana.
Aprovecho para compartirles en esta ocasión, que este es el último
año que pretendo celebrar soltera, ya que he tomado la firme decisión de unirme
en matrimonio con un maravilloso hombre. Sé que muchos de mis lectores se
cuestionan, por el perfil de mi blogg: ¿Y ella no decidió hace mucho tiempo ser
soltera? Pues sí, pero hace tres años conocí a alguien que en este febrero me
hizo cambiar de decisión. Gracias a lo feliz que me hace. “El fin no lo he
cambiado, solo he variado la ruta”. Mi objetivo es ser feliz, y todo lo que me
aleje de mi objetivo es apartado, como todo lo que me acerque es bienvenido.
Esta es una etapa de mi vida que va a dar mucho de qué hablar y de qué
escribir, mi Amiga Juanita está feliz, afirmando que el verdadero amor existe y
que no debemos desesperarnos, y como dicen por ahí: solo piensa tirar la toalla
en la arena para tomar el sol.
Quiero agradecer cada mensaje de texto, cada mensaje en las
redes sociales, llamadas, visitas, presentes que mis amigos y familiares han
dedicado toda esta semana. Me siento más que bendecida y afortunada. Cada felicitación
me hace sentir lo bueno que es estar vivo y dar gracias a Dios por todo lo que
nos provee. Me considero la hija mimada del Padre.
Doy gracias al Señor por todo lo que estoy viviendo, por
sentirme con el romanticismo de una adolescente, llegando casi al medio siglo
de vida. Perdiendo la vista, pero ganando visión. Aceptando las nuevas líneas de
expresión en mi cara, que certifican lo que he vivido. Con licencia para aceptar
que será muy difícil volver a la talla de los 20, que dicho sea de paso, no me
trajo nada especial. Continúo dando gracias por la vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario