Celebra la Vida!

"Celebremos por lo que tenemos, y sobre todo, con lo que tenemos"

Todos de alguna manera nacemos felices. Somos el centro de atención de las personas a nuestro alrededor, sin gran esfuerzo.  A medida que vamos creciendo, celebrar va cobrando un significado diferente y nos hacen esperar todo un año para celebrar nuestra vida. Sin embargo, ya a cierta edad, vamos entendiendo el placer de celebrar cada día, de celebrar la vida!
Quienes me conocen, pueden entender que para mí es una tarea muy fácil, pues siempre me han visto celebrar. Y les cuento, no es lo mismo, celebrar, bailar o  tomar,  que: Celebrar la Vida!

Hace aproximadamente seis años viví la experiencia de acercarme a la muerte, y la verdad, agradezco a Dios por vivir esa gran experiencia, que pocas personas tienen el privilegio de vivir; para reconocer lo que es verdaderamente importante. Para aprender a celebrar de una forma diferente.

Cuando vives una emergencia, o eres diagnosticado con una enfermedad difícil de curar, comienzas a conocer lo que es verdaderamente importante para ti y a quien realmente le importas. Por eso, es un momento difícil, que puedes asumir de manera positiva. Aunque, recomiendo no esperar que esto suceda para hacer inventario de lo que es importante para nosotros y celebrar. Sin dejar de asumir la vida con responsabilidad.

He decidido celebrar la vida, dar gracias por cada oportunidad que se nos presenta cada mañana. Disfrutar lo que ahora tengo, no lo que estoy esperando tener. Establecer objetivos, es ir por mas, es bueno. Pero, vivir montados en un tren que nunca llega a la meta, porque cada vez que nos acercamos establecemos una nueva, nos hace sentir incompletos.

Celebremos por lo que tenemos y sobre todo, con lo que tenemos. No esperemos estar más flacos, graduarnos, casarnos, viajar, cambiar de trabajo... y muchas de esas excusas que sólo nos hacen ser personas mal agradecidas.

Celebrar tiene muchos colores, tantos como el arcoíris. Tiene muchas manifestaciones: salta, baila, ríe, llora, abraza, besa. Despide, recibe, acompaña, corre. Bendice, ayuda. Por decir unas cuantas. Celebrar no requiere de espacio, ni día especial.

A partir de hoy, haz una cuenta nueva con la felicidad,  deposita diariamente los momentos felices, esas cosas pequeñas que suceden cada día y te dejan una sonrisa. Saca el balance de lo que posees, te darás cuenta que la felicidad es una decisión personal. Entonces celebra por todo lo feliz que eres. Celebra la vida!